

Hace mucho, mucho tiempo, todos los animales podían hablar.
Mamá Mosquito y Bebé Mosquito vivían en una casa.
Mamá mosquito siempre dejaba a bebé mosquito en la casa cuando iba en búsqueda de comida.
Un día, cuando Mamá Mosquito se fue de la casa, Bebé Mosquito quería ir afuera.
Cuando Mamá Mosquito regresó, se dio cuenta que su hijo no estaba.
Mamá Mosquito estaba preocupada. Bebé Mosquito estaba todo solo afuera.
Pero en ese momento, Bebé Mosquito regreso a la casa.
Bebé Mosquito estaba muy emocionado.
"Mamá, los humanos estaba muy felices de verme ¡Aplaudían con sus manos cada vez que pasaba cerca a ellos!"
Mamá Mosquito estaba alarmada.
"¿Estas diciendo que estaban felices y aplaudiendo por ti?" le preguntó a su hijo.
"No estaban felices de verte ¡Estaban intentando espicharte!" explicó la mamá
"Los humanos nunca están felices de ver mosquitos," le advirtió.

